VIDEO con MI VOZ:
“RASGOS” (relato breve)
Era una mañana de profundo vacío, una más de la cuál ella ansiaba salir.
Fue hasta la ventana de su dormitorio, y apoyando sus codos sobre el aféizar, sujetaba su rostro con las manos.
Cerró los ojos y volvió la cara hacia el sol, disfrutando de la tibieza de la luz que se filtraba a través de sus párpados.
Fue hasta la ventana de su dormitorio, y apoyando sus codos sobre el aféizar, sujetaba su rostro con las manos.
Cerró los ojos y volvió la cara hacia el sol, disfrutando de la tibieza de la luz que se filtraba a través de sus párpados.
Sin saber por qué, vino a su mente un recuerdo, una
imagen... Quiso recordarle, necesitaba saber si se había marchitado toda la
ternura que en otro tiempo sintió al pensar en su figura, y revivir así aquellas
primeras señales del nacimiento de un gran amor, poniéndole el nombre y
apellidos de quien se los provocaba.
Sus rasgos inconfundibles en su mente perduraban:
Esbelto, buena figura y aquellos enormes ojos verdes que
reían cuando la miraban. Su encantadora sonrisa y los hoyuelos que ésta
producía en su atractivo rostro; su pequeña mancha de nacimiento, en forma de
haba, sobre la piel de su hombro izquierdo. Todos sus rasgos, en su memoria
aún anidaban.
Inspiró aire y percibió en la atmósfera un leve aroma a
jazmín y sal.
De pronto, suena el teléfono, el sonido la sacó violentamente
de su ensoñación.
Abrió los ojos y, súbitamente, volvió a la realidad.
La vaciedad volvió a habitar en la habitación y en lo más
profundo de su alma, porque cuando la soledad aprieta, los recuerdos ahogan la
calma.
Sólo fue un instante de dulzor.
Sólo fue un instante de dulzor.
“Y ella sintió que el escaso equilibrio de su vida pudo haber sido quebrado, pero retrocedió a tiempo, del borde del abismo al que el recuerdo... la había empujado”
Geles Calderón
(Enero 2010)
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(Enero 2010)
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Precioso, y tú voz envuelve a cualquiera, porque es realmente bonita.
ResponderEliminarBesos.
Tú siempre tan amable, Rafa.
EliminarFeliz día. Un gran abrazo, amigo.
Ensoñaciones perdidas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Algo así.
EliminarUn beso.
Un final apoteósico, que bien suena en tu voz. Un aplauso y un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias, Ester. Otro abrazo para tí.
EliminarHola Geles.. Maravilloso, seguro que a Rafa y a mi se nos acabarían los adjetivos.. Pero leer tus poemas al tiempo que los oímos de tu dulce voz, como entonas cada frase, es una gozada.
ResponderEliminarSon las 9 de la mañana y me has alegrado el día.. Un abrazo.
Me da una gran alegría leer lo que me dices. Saber que empezaste bien el día 'conmigo' sin estar, para mí es muy valioso saberlo. Ello da sentido a mi entrega. Mil gracias por hacermelo sentir.
EliminarTú también me has alegrado el día...
Un fuerte abrazo.
Añoranza, residuos de un antiguo sentir que regresa revoloteando entre los senderos del tiempo para refrescar lo que, sin ser, quedó. Un íntimo y muy buen relato Geles.
ResponderEliminarMis felicitaciones. Te admiro, lo sabes.
L. G.
Bien definido, sí señor! Muchas gracias siempre, catedrático.
EliminarAcabo de leerlo en otro relato:algunas veces creemos que cerrando los ojos nos hará invisibles¡¡¡..no, cerrando los ojos no nos hace invisibles,nos hace vulnerables, y vulnerables al pasado,nos acerca a un abismo, como dices,y nos produce un vertigo de emociones,¿y si ese amor solo existiera cuando cerramos los ojos?¿ y si la vida real es cuando cerramos los ojos y el sonido del telefono es solo un sueño?...lo malo de mis parpados caidos es que se me amontonan malos recuerdos,juntos con los buenos, y a veces me alivia volver a abrirlos,volver a escuchar el monotono sonido de un telefono...me imagino que eso me mantiene con mis ganas de vivir,no hundirme en el abismo, no desequilibrarme¡¡¡(un relato más, un instante más que añadir a mi vida,-a veces pienso que estos instantes,estos parpadeos, es lo que me hace querer vivir más¡¡¡¡)
ResponderEliminarVivir es más que respirar. Recordar cerrando los ojos te empuja a abismos a veces deseados, a veces temidos. Soñar también es vivir, disfrutas y sufres, 'eso' es la vida. Aceptémosla como es... sin perder el equilibrio.
Eliminar¡¡¡Cómo me gustan tus poesías!!!. Es increíble, como siento por dentro. Te quiero, Geles. Enhorabuena por el don q Dios te dio.
ResponderEliminar¿Sabes?, escribo como siento. Comparto con el fin de hallar seres, como tú, que se identifiquen; que comprendan el sentido de mis letras; que se vean en ellas reflejados/as, y que, a su vez, me descubran también a mí. No aspiro a más... o a menos. No sé si es 'desear' mucho, pero al menos lo intento. Escribir siempre fue para mí una terapia.
EliminarGracias por tus cariñosas palabras, te envío un gran abrazo, querida Rosa María.
Precioso Geles tienes carisma para escribir y para recitar con esa bonita voz tus preciosos poemas te felicito un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias, Javier. Besitos al nieto.
EliminarRecistas precioso y escribes mejor aún si cabe, gracias por tus poemas, poderlos es cuchar es un gustazo.
ResponderEliminarTere De León (desde Face)
Gracias Tere.
EliminarQue bonito!!!! q duzura tienes en la voz y con q sentimiento lo dices me encanta!!!
ResponderEliminarSagrario
(desde facebook)
Gracias, Sagrario.
EliminarQue bonita poesia, gracias eres un sol.
ResponderEliminarEncarna (de face)
Gracias a tí.
EliminarPrecioso, apasionado y al final triste como la vida misma, un abrazo.
ResponderEliminarAsí es...
EliminarUn abrazo.
Muy, muy guapo.
ResponderEliminarUn instante de debilidad y dulzor maravilloso y endulzado con tu voz. Me encantó.
ResponderEliminarSiempre consigues llevarme a otra parte... .
ResponderEliminarNoa
Espero que 'esa otra parte' no te haya perturbado.
EliminarGracias por tu visita, Noa.