VIDEO con MI VOZ:
“LADRONA YO, CARCELERO
TÚ”
(18-07-02)
-“Hoy
necesito meditar...”
me dijiste aquella noche,
y te marchaste a navegar
sin oír ningún reproche.
Y a la mañana siguiente
te citaste con el viento,
te sentaste frente a frente
y le hablaste a pecho abierto.
Con dolor en la palabra
y en la hondura del silencio,
tú al viento le contabas
cuál era tu sufrimiento.
Y sentado frente a ese mar
que sabe tu sentimiento,
gritar querías sin parar
mi nombre desde muy dentro.
Pero fuerzas no tuviste
y fue el mar quien cumplió el hecho,
buscó en ti lo que no diste,
y halló mi nombre en tu pecho.
Esas letras que te pesan
como si fueran de hierro,
que dentro de ti no cesa
su sonido en tu silencio.
Y aquel mar gritó mi nombre,
y el sonido izó a los cielos...
desgarrada voz de hombre:
¡sonido de sal y viento!
Pero hay tiempos en que hieres,
en que duelen las palabras,
aquellas que tú me dices,
y las que creo que callas.
Aprenderé a saber estar
en un rincón extremo,
donde ya nadie me verá...
porque nadie mira dentro.
Yo sé que robé tu alma
cuando miré dentro de tí,
y viendo lo que albergaba...
te la arrebaté para mí.
Hoy te resientes de ello
y me acusas de ladrona,
sabiendo que en tu pecho
me aguardaba una encerrona.
¡Ladrona yo, carcelero tú!
Ambos cambiamos el alma:
en mí vive la tuya, y...
¡la mía en tí encarcelabas!
Geles Calderón
me dijiste aquella noche,
y te marchaste a navegar
sin oír ningún reproche.
Y a la mañana siguiente
te citaste con el viento,
te sentaste frente a frente
y le hablaste a pecho abierto.
Con dolor en la palabra
y en la hondura del silencio,
tú al viento le contabas
cuál era tu sufrimiento.
Y sentado frente a ese mar
que sabe tu sentimiento,
gritar querías sin parar
mi nombre desde muy dentro.
Pero fuerzas no tuviste
y fue el mar quien cumplió el hecho,
buscó en ti lo que no diste,
y halló mi nombre en tu pecho.
Esas letras que te pesan
como si fueran de hierro,
que dentro de ti no cesa
su sonido en tu silencio.
Y aquel mar gritó mi nombre,
y el sonido izó a los cielos...
desgarrada voz de hombre:
¡sonido de sal y viento!
Pero hay tiempos en que hieres,
en que duelen las palabras,
aquellas que tú me dices,
y las que creo que callas.
Aprenderé a saber estar
en un rincón extremo,
donde ya nadie me verá...
porque nadie mira dentro.
Yo sé que robé tu alma
cuando miré dentro de tí,
y viendo lo que albergaba...
te la arrebaté para mí.
Hoy te resientes de ello
y me acusas de ladrona,
sabiendo que en tu pecho
me aguardaba una encerrona.
¡Ladrona yo, carcelero tú!
Ambos cambiamos el alma:
en mí vive la tuya, y...
¡la mía en tí encarcelabas!
Geles Calderón
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Que maravilla,leerla es sentirla, escucharla emociona. Un abrazo
ResponderEliminarGracias por tus palabras, Ester.
EliminarUn abrazo.
Hola Geles, leyendo el poema me has hecho sentir y emocionarme, genial este poema, muy real como la vida misma.
ResponderEliminarFeliz tarde.
Un abrazo
Haceros emocionar y sentir, es el fin de mis poemas o breves relatos. Tú bien has dicho: 'como la vida misma'.
EliminarUn abrazo.
Hola Geles.. Precioso el poema, las palabras como la vida dia a dia, unas veces hieren otras reconfortan, pero a veces se roban, aunque sean para conseguir la felicidad..
ResponderEliminarUn abrazo.
Todos fuimos en algunas ocasiones: de sentimientos ladrones, o carceleros..., o de amores prisioneros, ¿verdad, amigo?
EliminarUn abrazo.
Poetisa, me declaro prisionero de la cárcel de tus versos y me encadeno voluntario a la majestad de tu talento.
ResponderEliminarGeles Calderón, contigo aprendí, que el carcelero también es un prisionero, por tanto, las letras de tus poemas también son tu chirona. No solo eres la que custodia, también eres la cautiva (del arte que dominas). Y tu voz, (tu voz) es el “modus operanti” con el que sustraes corazones sin siquiera tocar el pecho.
(Te admiro y tú lo sabes)
Uf, hoy es un gran día. ¡Cuánto echaba de menos tu visita, Juan Carlos! Gracias por acordarte de mí. Tus palabras siempre me sanan, alegras mi día cada vez que nos 'reencontramos' en este oscuro rincón, acantilado o prisión. Descríbelo como quieras, caballero sin identificación, y eso ya ¡qué más da! Lo que para mí cuenta es que 'sin saberte' te sé, porque el corazón tiene ojos que la mirada no ve.
EliminarNo merezco tanto halago, soy una insignificante autodidacta que descarga en torpes renglones lo que siente..., simplemente.
Yo sí que te admiro.
Un abrazo sentido, amigo desconocido.
¿?
Un bello poema lleno de realidad.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias Tomás.
Eliminar"Inclinado en las tardes tiro mis tristes redes a tus ojos oceánicos, alli se estira y arde y la más alta hoguera mi soledad que da vueltas los brazos como un naufrago" de Pablo Neruda...cuando era joven solía memorizarme poemas que me gustaban mucho...esto es de los pocos, (creo que el unico) que todavia recuerdo de aquella época...me lo has hecho recordar cuando he leido tu poema..el mar,la carcel del cuerpo y el alma..
ResponderEliminarCasi todos los dias visito mis playas(ya parecen que son mias de tanto que las piso),y muchas veces me acuerdo de aquel poema de mi juventud,que todavia me recuerdo, y espero que este poema tuyo, tambien se me quede en mi memoria, como un precioso poema de amor, como los que nos contaba Pablo...
Estaba sentado en el restaurante,cuando entro una chica por la puerta, me recordaba a alguien,me sonaba su cara, ella tambien me miro..tambien yo le recordaba a alguien,...¿a quien?..ah, claro,ya caí, era esa chica rumana de hace dos semanas,esa que le invitaste a una copa(y nada más),de esas que hacen cualquier cosa por dinero, me acuerdo que le conté, que me sentia muy viejo, que ya no era joven,que sentía que solo me quedaba pasado y presente,que ya no habia futuro....y me animo, me dijo que todavia me queda tiempo..(claro,que por dinero te dicen cualquier cosa...)...
Me da esa la impresión,que ya solo nos queda historias pasadas, que solo existen historias de amor pasadas,que solo nos queda recordarlas...como ahora que tu poema, me hizo recordar historias de amor pasadas( imposibles y soñadas), de cuando era joven, y me memorizaba poemas...parece que solo existe el pasado, y solo alguien interesado es capaz de engañarte, y decirte que todavia quedan historias de amor por vivir...
Todavia nos queda mares, vientos, y rejas para encerrar los amores pasados¡¡¡
(Robo tus poemas y me encarcelo en sus versos)...
Aprendí que las rejas nos las ponemos nosotros mismos, y que si así lo haces nadie va a venir con las llaves, sólo tú tienes ese poder. Quiérete más; valórate; atrévete a aprovechar tu tiempo, a vivir...
EliminarMis poemas son de toda persona que vea más allá, e intuya que hay una vida, una historia tras ellos. Llévate cuantos quieras.
Un abrazo.
Poema triste pero profundo.
ResponderEliminarGracias, José Ignacio.
EliminarSoy yo otra vez, he venido para decirte que hoy te menciono en mi blog al dar la bienvenida a los nuevos seguidores. Aunque hace mucho que yo te leo. Un abrazo
ResponderEliminarAcabo de venir de tu blog. Gracias por el detallazo.
Eliminar¡Que la fiesta continúe!
Besitos.
Hola, Geles, tus palabras se adentran en mí y me inundan de sentimientos y poesía. Genial.
ResponderEliminarSiempre he pensado que las mejores creaciones se pueden dar cuando tenemos adversidades o sufrimientos.
Te dejo un abrazón.
Gracias Mari Carmen, por hacerme saber que mis palabras, salidas del dolido sentimiento, te pellizcaron un poquito el corazón.
EliminarOtro abrazón para ti.
Me gusta tu poema porque puedo reconocer sentimientos comunes los míos y a los de cualquier ser humano cuando ama.
ResponderEliminarUn abrazo.
PD. ¿Te has borrado de mi blog? No veo tu imagen.
Estoy en tu blog. Yo tampoco te veo en el mío, pero lo que cuenta es que ambas nos leémos, disfrutamos y nos identificamos con lo que escribimos.
EliminarUn abrazo, Fanny.
Bonito ,emocionante cuanto amor en esos corazones . Prima..
ResponderEliminarGracias, prima.
EliminarHermoso...como todo lo que sale de tu alma..... emocionante y profundo ....una caricia en nombre del amor...
ResponderEliminarMis más sinceras congratulaciones preciosa Geles.
Besos y bendiciones.
Gracias, ladrón! ;)
EliminarGeles...es hermoso escuchar tu dulce vos,pero no se donde dejar comentarios en lo que últimamente has publicado
ResponderEliminarBesosss desde Argentina
Querida Doris, justo acabas de comentar en el sitio correcto. Al final de cada entrada donde dice 'Comentarios'.
EliminarRegresa cuando quieras. Un abrazo.
Un sentir encadenado a las lindes del amor
ResponderEliminarese que nos sitúa entre una cárcel y la plena libertad ...
todo es un revivir en esta vida
Justo ahí, en ese punto intermedio, es donde el revivir duele y el olvido condena. Mejor mantener limpio y transparente el cristal del hoy, para ver por dónde mos llevan los pasos inmediatos de nuestro corazón.
EliminarUn beso.
Madre mia,,, que chulo...sabes?...desde hace poco estoy descubriendo el escuchar....leerlos no me gusta tanto, por no saber darle la entonacion.....correcta,,,,precioso....un besazo desde murcia....
ResponderEliminarPues ya sabes: vente por aquí de vez en cuando, tengo decenas de poemas de mi autoría con mi voz. Espero que los disfrutes.
EliminarUn abrazo desde Madrid.